La Universidad de Buenos Aires (UBA), ha solicitado a la Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo (FADU) la organización del llamado a Concurso de Ideas, no vinculante, bajo la modalidad “a una sola vuelta”, para el “Diseño de la Nueva Escuela de Educación Técnica de Nivel Secundario” de la Universidad de Buenos Aires.
El concurso se basa en el desarrollo de propuestas para la Nueva Escuela de Educación Técnica de Nivel Secundario de la Universidad de Buenos Aires con orientación en Tecnologías de la Información y la Comunicación, cuya sede será el edificio ex-Palacio Otamendi, conocido también como “Palacio Belgrano”, ubicado en la calle Sarmiento 1427, entre Lavalle y Belgrano, de la Localidad de San Fernando, Prov. de Buenos Aires.
El jurado entregó en orden de mérito: Primer Premio, 3 Menciones Premiadas (sin orden de merito), 3 Menciones Honorificas (sin orden de merito). A continuación los dejamos con una mención honorífica y una mención premiada.
MENCIÓN HONORÍFICA
Autores: Pieretti-Gallino-Stopponi (Arq. Jorge Pieretti (arg.), Martín Gallino (arg.), Valerio Stopponi (ita.)
Equipo de proyecto: Arq. María Laura González, Maximiliano Mineo
Memoria: Rodrigo Kommers Wender
El terreno de media manzana, irregular, la preexistencia del Palacio Otamendi -construido en la década de 1880-, árboles a preservar, y la propia naturaleza del programa, suponían pensar la estrategia de implantación en una serie de edificios aislados. Bajo esta premisa, la propuesta se centra en la creación de un basamento público de acceso restringido que articula todo el programa de la escuela. Distintos edificios albergan estos programas y configuran los bordes del lote que a su vez definen la espacialidad interior de la implantación.
Este gran lugar interior, al que podemos acceder desde diferentes puntos, funciona como espacio de interacción para los alumnos y también como un nuevo espacio para la comunidad; tiene características de espacio público. Al considerar los edificios como puntos de atracción, son los recorridos entre estos edificios los que crean la dinámica de los encuentros. Pensamos en esta clase de interacciones que ocurren en la vida cotidiana en un espacio colectivo.
Distribuir el programa en edificios separados, por un lado permite que la escuela sea construida en etapas sin afectar su funcionamiento general, factor que debería ser considerado en toda construcción de un edificio público; y por otro, posibilita definir técnicas proyectuales específicas: desde la organización de los espacios y la relación de los programas entre sí, hasta la propia elección de los sistemas constructivos.
Si en toda aparente restricción podemos encontrar respuestas a un problema, fue en la propia ubicación del palacio y de los árboles existentes, conservados en un ochenta por ciento, donde encontramos algunas de las directrices para la implantación de los edificios y la distribución del programa. Aunque sea el espacio público en planta baja el que comunica un edificio con otro, existe entre ellos una estructura circulatoria interna que los conecta entre sí por medio de puentes, uniendo todo el programa principal: ciclo básico, ciclo superior, biblioteca, administración, laboratorios, espacio para el arte y talleres; una vez que se accede a un edificio se puede ir a los otros sin necesidad de bajar al patio.
El Palacio Otamendi, que alberga la administración y la biblioteca, establece diferentes relaciones de proximidad entre los distintos edificios que buscan tenerlo siempre de escenario para enfatizar su importancia en el conjunto como elemento integrador de la propuesta: al caminar, por ejemplo, por los espacios circulatorios de los nuevos edificios siempre lo tendremos a la vista.
Conectado a palacio, el edificio de laboratorios conforma la esquina de las calles Sarmiento y Lavalle, es ahí donde se encuentra en la planta baja la sala de exposiciones en una relación visual directa con la calle. Comparte núcleo de escaleras y ascensor con el edificio de talleres para maquinarias, al que también se conecta a través de un puente; este edificio, ubicado sobre la medianera de la calle Lavalle, oficia como telón de fondo al palacio y al mismo tiempo resguarda del ruido a las otras actividades de la escuela; por la naturaleza colectiva de programa fue planteado como un espacio común en lugar de aulas separadas.
Al reconocer la importancia institucional del proyecto, la cercanía con la estación de trenes y la relación con las construcciones en altura de los alrededores, se determinó la altura máxima del edificio de aulas -ubicado sobre la calle Sarmiento- en base a la altura de la torre del Palacio Otamendi. La marcada tensión entre estos dos edificios se resuelve por medio de una buña que los separa y al mismo tiempo los unifica.
El edificio de aulas alberga el ciclo básico y el ciclo superior, además del comedor con terraza en el cuarto nivel, que marca el quiebre volumétrico del edificio. La sala de exposiciones en planta baja completamente vidriada permite visuales hacia el exterior y hacia el interior enfatizando la idea de un espacio permeable y transparente. Desde los espacios de circulación en los demás niveles siempre se tiene el patio principal como escenario.
El gimnasio/SUM completa la intervención sobre la calle Belgrano, y define los límites del patio central en conjunto con el edificio principal y el bar. Además de las actividades deportivas habituales, puede utilizarse como salón de actos o como espacio para actividades barriales; la abertura de las carpinterías duplica el tamaño del patio central.
Se optó por materiales simples y nobles que no requiriesen tecnologías constructivas complejas para así garantizar buenos estándares de calidad en la ejecución y facilitar la manutención a lo largo de la vida útil de los edificios.
El afuera es una cáscara de ladrillo opaca y el adentro un corazón de vidrio en un permanente juego de transparencias y reflejos entre un edificio y otro; por momentos estar en el patio es casi como estar en un caleidoscopio.
Además de dar respuestas a problemas técnicos, estéticos y simbólicos, consideramos la propuesta también en su dimensión ética: creemos en la revalorización del rol del la enseñanza pública, así como creemos que debemos como profesionales asumir un compromiso intelectual en la creación de espacios que nos pertenezcan y que sean pertinentes para la educación pública.
MENCIÓN PREMIADA
Autores: Arquitectos Maximiliano Alvarez y Axel Tanner
Equipo de proyecto y Colaboradores: Arqtos. Leticia Alfaro, Agustina Arias Agustín DeSimone, Francisco Piferrer, Pedro Natalizio, Joaquin Mateu, Felipe Barletti, Mercedes Di Loreto
El sitio alberga un Gran Patrimonio para el Barrio, no solo por el Palacio Otamendi como pieza construida, sino además por su entorno y forestación centenaria. Vacío urbano simbólico, que junto a la plaza Mitre y la plaza de la Estación San Fernando triangulan una situación de espacios para la comunidad inigualables. Pensamos una escuela que pone en valor el Palacio, refuerza su identidad, y que en conjunto, serán un pilar en la organización estratégica de la zona.
Pensamos la escuela como el espacio público por excelencia, como lugar de inclusión y comunión social.
Reflexionamos nuestra propuesta como ese ámbito público; donde se desarrollan las actividades culturales, educativas, recreativas y deportivas, tanto para el colegio como para la comunidad. Serán estos el claustro, el gimnasio, los patios, cada uno con su escala, el parque, la biblioteca, los lugares de arte, y por supuesto, el aula. Todos estos lugares en permanente comunión con la ciudad, entendiendo una escala y una contención propicias para la reflexión y el disfrute, fundamentales para un lugar de educación. El proyecto propone un edificio versátil, de accesos controlados donde las instancias entre lo público y lo privado se dan con absoluta naturalidad y los diversos usos públicos funcionan tanto en conjunto, como con total independencia, los días festivos, fines de semana y de manera nocturna.
…”La escuela se presenta como un centro comunitario que alberga tanto funciones educativas como recreativas y culturales. Bajo este concepto no sólo los recintos, sino todos los espacios de la escuela cumplirán una función educativa. Sean áreas cubiertas, semicubiertas o descubiertas…” Programa Nacional 700 escuelas
Génesis del Proyecto
En Relación al Tejido.
Abogamos por una ciudad sin rupturas de tejido. Pero fue premisa desde la visita al sitio y al predio; mantener la centenaria forestación existente, esquina simbólica del barrio a tan solo una cuadra del lugar Fundacional, la Plaza Mitre. El peso de lo prexistente nos llevó a descifrar como iba a consolidarse la zona, a partir de la puesta en valor del palacio y la construcción de la escuela. Por esto, y permitiendo la posibilidad de un futuro crecimiento de la escuela hacia cualquiera de las medianeras existentes, decidimos liberarlas, esperando la respuesta del barrio y de nuestro lindero, que puede o bien consolidarse como parcela privada o convertirse en anexo a la propia escuela. Por todo esto pensamos decididamente que no es momento de consolidar medianeras con operaciones intermedias o enchape de tejido.
Nos parece importante, no solo mantener la forestación, sino además que se convierta en una permanente utilización de los alumnos. Ciertos datos intrínsecos y de codificación del terreno nos arrojan indicios de por dónde iremos configurándolo:
- Las cotas del terreno natural sobre nivel de vereda tiene dos niveles relevantes. La cota +0.70 mts de terreno natural casi en el 70% del terreno y la cota +0.30 mts en el resto. Esto implica que para cualquier tipo de proyecto, va a ser necesario un movimiento considerable de terreno.
- El nivel máximo de edificación permitido para la zona es de +14,40 mts. El proyecto busca consolidar esa altura, fomentando la homogeneidad morfológica de la zona, virtud del paisaje urbano. Esto implica, tres niveles de Aulas, para los ciclos Básico y superior, dejando una planta baja de 4 mts de altura, que permite transparencias entre el espacio urbano y la arboleda de Tipas.
Así se conforma el claustro, tipología edilicia por excelencia para edificios de educación.
Con respecto a la ubicación del gimnasio, se decidió teniendo en cuenta las posibilidades del terreno, a partir de conservar el patrimonio edilicio y forestal. Así se verificaron las posibilidades de enterrar en la zona, y concebimos la viabilidad de hacerlo, no solo por la existencia de edificios cercanos con cota de acceso a -2,5mts., sino además, por la necesidad de nivelar con la tierra que se extrae, todo el terreno natural a +0.90mts de nivel de vereda.
De la Tecnología del edificio
Las tecnologías utilizadas responden a los conceptos fundamentales de materiales para edificios públicos, en donde es virtud que tengan un mantenimiento mínimo, versatilidad, eficiencia energética y noble a la utilización de adolescentes. La estructura será de hormigón tradicional, de simples detalles de encofrado, pues nada del mismo quedara a la vista. Las Carpinterías integrales de perfilería estándar de aluminio, están pensadas en paños que permitan la utilización de perfiles económicos de buena prestación. Las misma resuelven paños de abrir, fijos, antepechos y Carácter de la fachada. Cielorrasos de placa de roca de yeso, permitiendo la flexibilidad en la iluminación de los distintos recintos.
De la Estructura programática, circulatoria y Soportante
De la Versatilidad del Proyecto
De la Eficiencia Energética
